COMENTARIO SOBRE LAS RECOPILACIONES NECRONOMICÓN DE PARTE DE UNO DE SUS CREADORES

Hoy he recibido un mail de Marcelo Expósito, el que fue co-autor de la serie de recopilaciones NECRONOMICÓN, en el que me comunicaba que intentó infructuosamente colocar un comentario en la entrada correspondiente, debido sin duda a algún mal funcionamiento del mecanismo de Blogger.

El texto del comentario que me ha hecho llegar por email es de una riqueza y de una importancia de tal magnitud, que por mi cuenta y riesgo he preferido convertirlo en una nueva entrada al blog para que no pase desapercibido.

Desde aquí le transmito mi más sincero agradecimiento a Marcelo Expósito por su impresionante aportación.



Éste es el texto de Marcelo Expósito:



muchísimas gracias a unos y a otros por el trabajo que os habéis tomado de recuperar las ediciones impresas del fanzine necronomicón.  creo que lo fundamental sobre este proyecto estuvo ya comentado en el blog handbeanies, ahora reproducido en spain pain - quizá pueda añadir, o subrayar, el hecho de que necronomicón nace como fanzine-k7 porque, a diferencia de otros muchos fanzines de la época, quienes podían hablar de grupos o músicas cuyas ediciones eran relativamente accesibles, nosotros nos vimos en la necesidad de adjuntar una edición de cassette para que esas músicas acompañaran la información y el trabajo grafico que el fanzine impreso mostraban -  necronomicón no fue un proyecto demasiado 'original' en su momento, digamos; pues el ambiente que se respiraba en los 80 eran de autoedición por todas partes, como evidente herencia, fundamentalmente, del 'do-it-yourself' (diy) punk - por un lado, explosión de sellos independientes en españa, superando la primera fase de la 'movida madrileña' supeditada a los sellos comerciales establecidos - al rebufo de esta eclosión de ediciones independientes, creció un firmamento de fanzines de todo tipo publicados por toda la geografía española -  pero también, por otro lado, crecía un sistema internacional (o mejor diríamos transnacional) de intercambio y colaboración que tramaba la producción musical industrial/electrónica/experimental, el resurgimiento del arte postal, arte correo o mail art en casi todo el planeta; etc. -  quizá la singularidad de necronomicón reside en haber buscado articular ambas 'escenas' - nosotros veníamos de la fanedizión más o menos clásica, publicamos anteriormente dos o tres fanzines orientados sobre todo (aunque no exclusivamente) a la nueva música independiente española e internacional (eran fanzines post-punk / new wave algo rudimentarios) - pero conocimos muy pronto las primeras compilaciones internaciones de sonido industrial/experimental, como el fix planet! del sello ata-tak (1981), que detonaron una explosión transnacional, y quisimos implementar lo mismo acá pero de manera inevitablemente artesanal; comenzamos muy pronto a pensarlo y ejecutarlo, creo que entre los años 1983-84 -  un par de datos que seguramente resultan obvios: no teníamos medios algunos, nada, cero redondo - escribíamos a máquina portátil mecánica o eléctrica - los textos escritos los reducíamos y las imágenes las fotocopiábamos en la copistería del pueblo (puertollano, provincia de ciudad real) - el proceso de edición era totalmente recorta-y-pega, con pegamento de barra y tijeras metálicas - el 'fanzine-máster' se llevaba a la imprenta del pueblo para que se imprimiera en off-set; en tiradas muy cortas, creo recordar que aprox 200 ?? no estoy seguro... -  se pagaba de nuestro bolsillo; vaya, fundamentalmente del bolsillo de mi muy querido compañero eduardo, quien era profesor de instituto y por lo tanto, aunque modesto, tenía un sueldo - yo tenía apenas 17 o 18 años y mi economía era casi inexistente - eso sí, casi todo me lo gastaba en correo y en comprar k7s y ocasionalmente discos a lugares remotos - (bah, y en otras cosas inconfesables) -  por tanto el fanzine tenía una tirada fija inicial salida de imprenta; pero las k7s se iban duplicando a medida que se iba distribuyendo - tb ese proceso era totalmente casero: se juntaba el material en una k7-máster, con una postproducción casi inexistente que básicamente consistía en equilibrar niveles de audio - de esa k7-máster se iban tirando copias mediente dos pletinas conectadas de manera sencilla -  en 1984 me fui a estudiar a madrid y comenzamos en 1985 la organización el festival bideoaldia (video eta muzak-crash) en tolosa (guipúzcoa), y mis visitas a barcelona se hicieron frecuentes a partir tb de ese momento - eso favoreció que intensificáramos nuestra relación de colaboración y de amistad con el campo de la experimentación sonora del resto del país; eduardo intensificó su trabajo de coordinación internacional a unos niveles de competencia insuperables - lo que hizo que cada necronomicón, dentro de su muchísima modestia, acabara siendo una pieza de contenido compacto y contundente, me parece -  para dar un ejemplo de cuál era la riqueza de las redes de colaboración en ese momento: la portada del número 4 es una especie de poema concreto realizado a partir del título de la cabecera necronomicón - lo compuso, con un ordenador casero, rod summers - un poeta experimental y sonoro británico establecido en maastricht, quien era en aquel momento un importante agitador de la escena mail-art -  un dato final: en muchos casos, los propios grupos o músicos enviaban sus collages o trabajos gráficos, que publicábamos tal cual - pero tb en muchas ocasiones la experimentación gráfica corría a cargo de eduardo y yo - a veces cada uno hacía sus páginas, otras veces uno hacía una base y el otro la mezclaba, en ocasiones uno hacía la imagen y el otro el texto...; en fin, era sin duda un trabajo enormemente colaborativo a todos los niveles -  de nuevo muchas gracias por vuestro trbajo de recuperación y redifusión -  marcelo (ex necronomicón) /